Se llamaban "preventorios" los edificios destinados a la prevención del desarrollo y propagación de enfermedades, como la tuberculosis infantil. Se buscaban para ellos ubicaciones en el campo, aislados, y en alto, para la respiración del aire puro, o incluso aprovechando la existencia de aguas termales.
En España tuvieron especial importancia, y se crearon numerosos de ellos por iniciativa estatal, durante la época de la posguerra.
Hoy están abandonados o rehabilitados para usos turísticos....